Descripción
En la pequeña localidad de Castrillo de Murcia, situada a escasos kilómetros de Sasamón, se celebra la fiesta de “El Colacho”, declarada de Interés Turístico Regional, el domingo siguiente al día del Corpus. En ella, un personaje llamado “Colacho” y ataviado con ropas de vivos colores recorre las calles fustigando a la gente con una cola de caballo. En varios lugares del pueblo se colocan altares de flores y delante de ellos colchones con los bebés nacidos en el año en la localidad.
El Colacho debe saltar por encima de ellos para librarles así de enfermedades. Después de la procesión por las calles del pueblo, la gente se dirige a las eras para oír el discurso del atabalero, bailar al ritmo de la música tradicional castellana y degustar un tradicional pan con queso y vino. El origen de esta fiesta se remonta al siglo XVII y desde entonces se ha seguido celebrando puntualmente.